5 de noviembre de 2020.

Hoy dejo aquí mi versión libre de la letra de esta copla que pide que no —solo— votes:
El viejo dicho sigue estando vigente:«Si no votas, no puedes quejarte».
Pero teniendo en cuenta la experiencia, uno se pregunta:«¿Podría un voto poner fin a todas las lágrimas?»
Lágrimas de frustración, lágrimas de pérdida,
lágrimas de opresión, lágrimas en la cruz.
Es fácil esconderse en las redes sociales;
nada que ver a cuando se está del lado de lo tangible.
Esta no es una película en 3D, pero hay donde elegir:
la imaginación alimentando tu voz,
tu voto usado como una varita mágica:puedes votar por tus sueños, de verdad.
No votes simplemente por un candidato porque te identificas con esa persona.
No votes simplemente por un partido político
hay más opciones que el blanco y el negro.
Vota por los ríos y el salmón en los arroyos,
vota por los océanos que fluyen desde el interior de tus sueños
sueños de igualdad; la vida es divina
sueños musicales de una mejor época.
Vota por la diversidad, no votes por los racistas, en serio, no votes por a esa gente, anula el racismo
su odio al diferente no tiene cabida en esta historia
Vota por el cambio o pagarás un alto precio.
Vota por una arquitectura maravillosa, por las buenas películas
vota con humor, en secreto, pero vota verdad.
Cada palabra, cada gesto tuyo decide.
Este sistema no es genial, pero es perfecto.No —solo— votes.
«Tenemos que extirpar un cáncer maligno del cuerpo político. Pero esto es solo el comienzo. La política real es lo que haces antes y después de ejercer el voto. Tienes que mantenerte al volante: compromiso, activismo, organización: eso es lo que marcará la diferencia ». —Noam Chomsky—